Curiosidades de nuestra Enseña Nacional

La señorita Marylin comparte esta investigación realizada por ella misma:

La palabra bandera proviene de dos lenguas diferentes: del latín que significa estandarte y del germano que significa signo.
    El Gral. Manuel Belgrano fue enviado para defender las orillas del río Paraná de los saqueos de los realistas en las cercanías de la Villa del Rosario (Pica. de Santa Fe), en los comienzos del año 1812 y para ello levantó dos baterías a las que llamó “LIBERTAD” e “INDEPENDENCIA” a orillas del mencionado río.
    El 18 de febrero de1812, el Primer Triunvirato creó la Escarapela Nacional con los colores celeste y blanco, para que usen como distintivo, ya que los patriotas usaban una escarapela roja como los españoles, y les hacía falta una bandera.
    El Gral. Belgrano al inaugurar las baterías, hizo construir un mástil y el 27 de febrero de 1812, izó por primera vez la Bandera Nacional y no fue en la barranca, sino en una isla, que desapareció por las sucesivas inundaciones.
     Tuvo el privilegio de izar nuestra Enseña nacional, el soldado COSME MACIEL, y fue saludada por una salva de cañonazos, a las 18,30 horas aproximadamente que luego lo acompañó en sus campañas al Alto Perú.
    Esta bandera fue confeccionada por la Sra. María Catalina Echeverría de Vidal, prestigiosa dama de la Villa del Rosario.
    Con respecto a la disposición de las franjas  y de donde provienen sus colores, existen varias teorías: la primera hace referencia a que Belgrano escribe al Primer Triunvirato donde le dice: “Siendo preciso enarbolar bandera y no teniéndola la mandé a hacer celeste y blanca, conforme a los colores de la Escarapela Nacional. Espero que sea de la aprobación de V.E”. Cosa que no ocurrió. El Gral. Belgrano consideraba que la existencia de una bandera serviría para entusiasmar a la tropa y que la defiendan hasta las últimas consecuencias y esas fueron sus palabras luego de izarla.
    Otra de las teorías sostienen que las franjas fueron verticales y de dos colores solamente: celeste y blanco y otra sostiene que fueron dos franjas celestes y en el centro el color blanco, que es la teoría más acertada, ya que estando en Europa un pintor pintó esa bandera.
    Con respecto a los colores también hay varias teorías: sostienen que a los colores celeste y blanco los tomó del manto de la Virgen Inmaculada Concepción, ya era la Patrona del Consulado, del cual él era Secretario. Otra de las teorías sostiene que los colores eran los mismos que tenía el Escudo de la Ciudad de Buenos Aires en ese momento. Otra de las versiones sostiene que en los días de Mayo de 1810, French y Beruti, repartían cintas blancas solamente y luego el cuerpo de los Patricios empezó a usar como distintivo una cinta azul que era el distintivo de la familia real, que por entonces nos gobernaba, precisamente de la Orden de Carlos III, padre de Fernando VII.
    Otra de las suposiciones sostiene que la Bandera que se izó por primera vez a orillas del río Paraná tenía dos franjas horizontales solamente: una blanca arriba y una celeste abajo.
    Con el correr del tiempo los colores de la bandera fueron modificándose y fue en la época del Gobernador del Brigadier J.M. de Rosas, que se modificó el color celeste por el azul y le agregó el Sol, con cara de mujer y 32 rayos de los cuales 16 son rectos y 16 ondulados y lo relacionan con el sol de la cultura incaica, ya que Belgrano era partidario de la monarquía incaica en las Provincias Unidas del Río de la Plata.
    Como no aceptaban el uso de la nueva enseña, Belgrano se hizo cargo del Ejército del Norte llevando la Enseña y la hizo bendecir en la Catedral de la ciudad de San Salvador de Jujuy, por el obispo Juan Ignacio de Gorriti el 25 de mayo de 1812, eligiendo esa fecha para recordar los sucesos ocurridos en Buenos Aires, dos años antes. Días después la hace jurar a sus soldados a orillas del río Pasaje, que en la actualidad se llama Juramento. En ese acto solemne Belgrano no hizo jurar a su tropa, sino prometer combatir a los enemigos españoles y defenderla hasta morir .Y desde entonces flameaba en el Ayuntamiento de las provincias de Salta, Jujuy, Santiago del Estero y Tucumán.
      En la ciudad de Buenos Aires, fue izada por primera vez, el 23 de agosto de 1812 en un improvisado mástil en la Iglesia de San Nicolás de Bari, donde hoy se encuentra emplazado el Obelisco.   
    Recién fue aceptada como símbolo nacional por el Congreso reunido en la ciudad de Tucumán, que días antes había declarado la Independencia, y ese día fue el 20 de julio de 1816.
    Se declaró el 20 de Junio como “DÍA DE LA BANDERA”, por iniciativa del presidente Roberto M. Ortiz, con fecha 8 de junio de 1938 con la aprobación del Congreso Nacional, y fue ese día recordando la fecha de la muerte de su creador y desde ese día se recuerda a la Bandera y a su Creador, decretándose desde ese año feriado nacional.
    En las escuelas no se recordaban las fiestas patrias hasta que 1889, el Consejo General de Educación estableció la celebración de las fiestas patrias en las escuelas, obligó la enseñanza de cada fecha, como así también a cantar nuestra canción patria: el Himno Nacional Argentino, la versión de Pedro Esnaola y era obligatorio que los edificos públicos y privados, coloquen la Bandera Nacional, los días de las festividades patrias. Los particulares eran multados sino colocaban la Bandera Nacional, en sus balcones o ventanas.
    Para finalizar decimos que los Símbolos Patrios: el Himno, la Escarapela, la Bandera y el Escudo Nacional se crean para identificar a un grupo que se encontraba en guerra en ese momento , luego de juntar a todos los habitantes bajo la idea de nación, para sostener la idea de formar una nación libre y para consolidar su identidad nacional.
     Y fue un joven educador,  Pablo Pizzurno , siendo director de una escuela, quien inauguró el rito de festejar las fechas patrias y de recordar a nuestros símbolos nacionales, crea “el amor a la Patria”, que llega hasta nuestros días.

Comentarios

  1. SEÑO MARYLIN EXCELENTE INFORMACIÓN SOBRE LA CREACIÓN DE NUESTRA QUERIDA BANDERA DE SEÑO FERMI

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